Dos buzos graban su encuentro frente a frente con una enorme anaconda de siete metros cuando exploraban un río en Brasil.
¿Cómo reaccionarías si te encuentras con una anaconda mientras estás en un río? Probablemente, saldrías corriendo de miedo al ver a un animal tan intimidante y peligroso; sin embargo, dos buzos hicieron todo lo contrario.
Los protagonistas de esta historia son Bartolomeo Bove y su amigo Juca Ygarape, quienes lograron captar estas sorprendentes imágenes de esta serpiente luego de sumergirse en el río Formoso, ubicado en el oeste del país.
Precisamente, esta zona del Estado de Mato Grosso do Sul es conocida por la presencia de anacondas, ya que cuenta con unos ríos cristalinos que facilitan ver a estos enormes animales nadando.
Mira a continuación el momento en que los buzos graban su encuentro con la anaconda
La más larga del mundo
La anaconda, también conocida como boa de agua, suele estar presente en el trópico de Suramérica. Es común encontrarla en los llanos de Venezuela y a las orillas del río Orinoco; así como en la zonas amazónicas de Colombia, Brasil, Ecuador, Perú y Bolivia.
Esta es la especie de serpiente más larga del mundo ya que puede llegar a medir hasta 10 metros de longitud y a tener un diámetro de 30 centímetros. Otras características que tiene este animal es que puede llegar a pesar hasta 2.000 kilogramos y tiene una vida de 15 años aproximadamente.
La anaconda no es una serpiente venenosa sino constrictora, por lo que atrapa a su presa con sus colmillos y usa su fuerza para enrollarse sobre su cuerpo para ahogar a la víctima y luego devorarla completamente entera.
Para muchos, la anaconda les recuerda las películas de ficción que se han hecho sobre estos sorprendentes animales, pero lo cierto es que estos aventureros lograron tener una experiencia increíble al nadar de cerca con esta enorme serpiente.
Buzos arriesgados
Lo cierto es que a estos dos buzos no les tembló el pulso para grabar a la serpiente que en varias ocasiones tropezó con la cámara. Los exploradores se acercaron a unos escasos centímetros y registraron en detalle la piel de la anaconda, su lento andar y hasta el movimiento de su lengua.
Bove, nacido en Italia pero radicado en Florida (Estados Unidos), ha arriesgado su vida en varias ocasiones al tener encuentros con peligrosos animales como cocodrilos y serpientes que parecen ser seducidos por su cámara.
En las imágenes compartidas se puede ver que a pesar de que la serpiente ve su presencia y la cercanía de la cámara, mostró total desinterés y continuó su nadado por estas cristalinas aguas.
El veterano buzo contó en su cuenta de Instagram que si esto hubiera ocurrido con los cocodrilos “me pudieron haber atacado” en cualquier momento si hubiesen tenido la oportunidad.
“Aunque la mayoría de los cocodrilos son de mayor tamaño que los humanos, la verdad es que perciben a un adulto como demasiado grande y por lo tanto una presa menos conveniente comparado con las que suelen cazar”, explicó Bartolomeo Bove tras entrar a la boca de uno de ellos y grabar el interior con su cámara.
El hombre entró en aquella oportunidad a las aguas cristalinas del increíble Banco Chinchorro, ubicado México. En ese lugar se cree que hay una población de 500 cocodrilos americanos, otra de las especies más temibles en todo el mundo.
El buzo también ha sido sorprendido por un tiburón toro cuando uno de ellos chocó contra su cámara mientras un grupo de tiburones se reunieron en Júpiter, la costa sureste de Florida.
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