Los héroes sí existen y esta historia te lo va a demostrar. En medio de los fuertes temblores que azotaron a Colombia el 17 de agosto, una perrita se perdió y gracias a la valentía de un reciclador pudo regresar de nuevo a su hogar.
El hecho se registró en la localidad de Engativá, en la ciudad de Bogotá, en donde Luna salió huyendo sin rumbo, luego de que abrieran la puerta de su casa para resguardarse del temblor.
Victoria Ramírez, propietaria de la peluda, no sabía que su perrita se había escapado hasta que llegó a su vivienda.
“Todo el mundo abrió la puerta para salir por el tema del temblor y ella salió corriendo. Yo estaba trabajando y cuando llegué me dijeron. Yo grité ¡Luna, Luna! Hasta que por fin me contestó, allá está”, señaló la dueña de la mascota.
La mujer se comunicó con varios organismos de socorro para que le ayudarán en el rescate de su perrita. Sin embargo, nunca obtuvo una respuesta positiva y la preocupación se apoderó de todos.
“Me dijeron que no venían que porque ya era tarde, parece que no les importara. He llamado a todo lado”, dijo.
La perrita fue rescatada luego de extraviarse durante unos temblores
En medio de la angustia que estaba viviendo esta familia, un reciclador apodado como el ‘Flaco’, al ver que la mujer no obtuvo respuesta de las autoridades, se arriesgó a entrar al humedal para buscar a la perrita.
Sin importar que fuera la una de la mañana y en medio de las bajas temperaturas, el hombre ingresó al agua y empezó a buscarla en medio de la oscuridad.
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El joven se adentró minuciosamente con un palo que llevaba como guía y finalmente dio con el paradero de la perrita, la cual se encontraba atrapada en una pequeña isla en medio del humedal.
Segundos después, un grupo de bomberos llegó para auxiliar al ‘Flaco’ y la peludita; pero el hombre estaba molestó al ver la poca empatía que habían tenido las autoridades y decidió salir por su cuenta con la mascota.
La comunidad aplaudió el gran gesto que tuvo este reciclador por la forma como arriesgó su integridad por buscar y salvar a la perrita.
Los vecinos de la zona le dieron agua para que se bañara y se quitara toda la suciedad que le quedó al entrar a este humedal. Además, los propietarios de Luna decidieron darle 150.000 pesos como recompensa por su valentía.
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