Una de las recetas más deliciosas y sencillas que puedes preparar en casa son las papas al horno con salsa bechamel. Este plato es ideal para compartir en familia y sorprender a tus invitados en cualquier celebración.
Este rico platillo va acompañado de jamón y tocino, pero puedes probar añadiendo otros ingredientes para variar el sabor y la textura. Algunas ideas son: champiñones salteados, pollo desmenuzado, espinacas, trocitos de chorizo o pimientos asados.
Las papas al horno con salsa bechamel son ideales para servir como entrante o acompañamiento en una comida o cena. Puedes comerlas calientes, recién salidas del horno, o dejarlas enfriar un poco antes de llevarlas a la mesa. Acompaña con una ensalada fresca y un buen vino para disfrutar de una comida completa y deliciosa.
Consejos para preparar las papas al horno con salsa bechamel
- Para esta receta, puedes utilizar cualquier variedad de papas que tengas en casa o las que más te gusten.
- Al preparar la salsa bechamel, puedes incorporar un poco más de leche si notas que ha quedado demasiado espesa.
- No dejes de remover durante la preparación de la salsa para evitar que se formen grumos.
- Si te gustan las recetas con papas, no dudes en probar otras opciones como las papas rostizadas o papas rellenas con queso y chorizo; que también son fáciles de preparar y quedan deliciosas.
¿Cómo puedes almacenar las papas al horno?
Si te sobran papas al horno con salsa bechamel, puedes guardarlas en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 3 días.
Para recalentarlas, llévalas al horno a 180ºC durante unos 10 minutos o hasta que estén calientes y el queso esté gratinado nuevamente.
En resumen, esta deliciosa receta es una buena opción y fácil de preparar para cualquier ocasión. Con ingredientes simples y un poco de tiempo, puedes sorprender a tus invitados con este exquisito plato que seguro se convertirá en uno de sus favoritos. ¡Anímate a probarlo!
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Papas al horno con salsa bechamel
Ingredientes
- 1 kg de papas sin pelar
- 200 gr de queso rallado
- 150 gr de jamón york
- 75 gr de tocino
- 500 ml de leche
- 150 ml para aclarar la bechamel
- 50 gr de harina todo uso
- 40 g de mantequilla
- Nuez moscada
- Sal al gusto
- Orégano al gusto
Instrucciones
- Lava bien las papas y cúbrelas con agua en una olla grande. Llévalas al fuego y déjalas cocinar durante aproximadamente 30 minutos desde que el agua comience a hervir.
- Cuando estén suaves, retíralas del fuego y déjalas enfriar un poco antes de pelarlas y cortarlas en rodajas de entre medio y un centímetro de grosor. Reserva las patatas para más adelante.
- Para preparar la bechamel, coloca la mantequilla en una sartén al fuego y añade las dos cucharadas colmadas de harina. Deja que la harina se tueste sin dejar de remover.
- Cuando la harina esté tostada, ve añadiendo poco a poco la leche caliente sin dejar de remover. Agrega un poco de sal y un poco de nuez moscada al gusto.
- Retira la bechamel del fuego cuando empiece a hervir. Si ves que la salsa ha espesado demasiado, añade un poco de leche y remueve hasta que tenga la textura perfecta.
- Corta el jamón york y el tocino en trocitos pequeños y reserva.
- Precalienta el horno a 180ºC.
- Extiende una pequeña capa de bechamel en el fondo de una bandeja para horno.
- Coloca una capa de rodajas de papas sobre la bechamel, aprovechando las que estén más rotas para cubrir esta base.
- Sazona las papas al gusto con sal y orégano, y espolvorea un poco de queso rallado por encima.
- Añade una capa de jamón york sobre las papas y queso.
- Cubre con bechamel al gusto y coloca el resto de las papas, sazonadas con sal y orégano.
- Por último, extiende otra capa de bechamel, un poco de queso rallado y unos trozos de tocino por encima.
- Introduce la bandeja en el horno y cocina durante aproximadamente 10 minutos o hasta que el queso esté gratinado.