Trucos fáciles para cambiar el color de tus suculentas: disminuye el riego y ponlas en un lugar soleado

Por su variedad de formas, colores y fácil cuidado, las suculentas se han convertido en la mejor opción para decorar el hogar. Esa misma variedad hace que quieras tener todas las especies en casa, pero a veces se vuelve complicado por múltiples razones. Ante esto, lo mejor es que aprendas a cambiar el color de tus suculentas sin dañarlas.

Es importante aclarar que este procedimiento no es para principiantes. El cambio de color de estas plantas se da a través de la fotosíntesis, en el cual absorben agua y dióxido de carbono para luego transformarlos en glucosa y oxígeno.

En la fotosíntesis los pigmentos que trabajan en la suculenta son la clorofila (verde), carotenoide (amarillo o naranja) y antocianina (rojo, morado o azul).

Esto quiere decir que la mayoría de las suculentas se encuentran en sombra o en un área con poca luz que les da un color verde, ya que la clorofila se encuentra más presente al ser la responsable de tomar todo lo que encuentre de luz solar para luego poner en marcha la fotosíntesis.

¿Cómo cambiar el color de las suculentas?

Para lograr que tus suculentas cambien de color es necesario ‘estresarlas’, es decir, recrear su hábitat natural y observar los cambios que presentan al exponerlas en condiciones extremas. Estos son los pasos a seguir:

Exposición al sol

Para intensificar el color de la suculenta, ponla en un lugar donde reciba la mayor cantidad de luz solar posible. La exposición directa estimula la producción de pigmentos en las hojas, lo que puede generar que tenga colores más vibrantes y llamativos. Sin embargo, te recomendamos que lo hagas poco a poco para que pueda adaptarse y no quemar sus hojas.

Puedes ponerlas durante el día en ventanas o balcones y guardarlas en zonas sombreadas de la casa durante las tardes y noches.

Reduce el riego

Disminuye la frecuencia del riego a medida que buscas cambiar el color de tu suculenta. Al proporcionarle menos agua, la planta se estresará ligeramente y comenzará a lucir colores más intensos como una respuesta natural de supervivencia.

Pero no dejes de regarla definitivamente y cuando lo hagas, procura que sea abundantemente y que escurra el líquido por el agujero de drenaje de la maceta.

Reduce el riego para que tu planta cambie de color. Crédito: Pixabay

No apliques fertilizantes

No les apliques fertilizantes ya que al hacerlo tus suculentas volverán a su color original. Si lo prefieres, puedes ya aplicárselos cuando quieras que tome su forma inicial.

Cambia la temperatura 

Cámbialas de temperatura de altas a bajas. Las suculentas se protegen en invierno o verano y en ambos casos hay cambios de color porque se ‘estresan’.

Este procedimiento no es apto para principiantes de la jardinería. Crédito: Pixabay

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