El papel de la mujer en el mundo deportivo había estado limitado por años, sin embargo, cada vez son más las representantes de las diferentes disciplinas que se vuelven un ejemplo a seguir para muchas niñas. Una de ellas es la gimnasta Alexa Moreno, quien pese al bullying y el clasismo que sufrió, pudo seguir su sueño y convertirse en toda una campeona.
El camino de la deportista mexicana no ha sido fácil, pues cuando entró al mundo de la gimnasia, no encajaba en los estereotipos convencionales de una atleta. Su cuerpo fuerte y poderoso no se ajustaba a la imagen estereotipada de una gimnasta, y esto la convirtió en objeto de burlas y críticas. Pero Alexa no se dejó influenciar por la negatividad.
Recientemente, en la Copa Mundial de Gimnasia Artística en París, Francia, la joven de 29 años de edad demostró que la paciencia, la disciplina y la constancia son las verdaderas cualidades de una campeona. Se alzó con la medalla de oro, dejando claro que su valía no se mide por su apariencia, sino por su habilidad y dedicación en el deporte.
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Alexa Moreno tuvo que lidiar con el bullying y el clasismo para cumplir su sueño de ser gimnasta
A lo largo de su carrera, Alexa ha enfrentado momentos difíciles. Después de su participación en los Juegos Olímpicos de Río 2016, fue víctima de burlas y chistes crueles sobre su apariencia física.
Pero en lugar de rendirse, eligió el camino de la resiliencia y la superación. De hecho, estas experiencias la llevaron a escribir su libro ‘Alexa Moreno: Singular y Extraordinaria’, donde comparte su historia de valentía y determinación.
En entrevista con Adela Micha en el programa ‘La Saga’, la gimnasta recordó cómo lidió con las críticas y el acoso. Además, resaltó que pese a los malos ratos, nunca perdió su amor por la gimnasia y su determinación para seguir adelante.
“Cuando supe [de las críticas] fue un poquito difícil, fue un poquito duro porque a nadie le gusta que lo critiquen, pero ya pasó”, comentó.
La atleta comprendió que el odio y las críticas contra ella no disminuían su habilidad en la gimnasia y centró toda su atención en el apoyo de las personas que estaban a su alrededor y en su propio amor por el deporte.
“Al final me convencí de que había hecho un buen papel, que había hecho mejores resultados de los que habíamos pronosticado, que había hecho una buena competencia. Eso era lo que valía la pena”, dijo en conversación para Olympics.
La historia de Alexa Moreno es un ejemplo inspirador de cómo superar las adversidades y romper los estereotipos. Además, ha demostrado que ni siquiera los prejuicios pueden detener a una mujer fuerte y decidida en su camino al éxito.