Para esta abuela mexicana el divorcio se convirtió en un acto liberador de amor propio inmenso y así lo celebra en uno de sus videos de TikTok.
Aida Senado se hizo viral en redes sociales por grabarse en el supermercado para contarle a sus seguidores lo feliz que está ahora que es una mujer soltera.
Ella no deja de admitir que decirle adiós a un matrimonio de años fue bastante difícil, pero también cuenta muy sonriente lo maravillada que está con su nueva vida.
Te puede interesar: Una mujer se casó consigo misma para consolidar su amor propio: “Me amo y me elijo”
La abuela celebra su divorcio muy feliz
Esta simpática mujer de la tercera edad tomó el supermercado como escenario para inspirarse y contar detalles que la tienen muy contenta después de haberse separado.
“Que él se encargue de poner lo que quiera en el mercado porque, por ejemplo, si yo quería un melón, me decía ‘¿para qué quieres un melón? A mí no me gusta’ y no lo ponía. Ahora que vengo al mercado y puedo escoger naranjas, manzanas y comerme lo que yo quiera estoy muy feliz”, comenzó diciendo Aida.
Ella comentó que aunque no fue algo fácil, ahora puede disfrutar de algo tan simple como ir al mercado y hacer las compras que le apetezcan.
“La verdad es que fue muy difícil a mi edad, después de tantos años de casada, dejar el matrimonio, pero miren ahora dónde estoy. Puedo andar por los pasillos el tiempo que me da la gana. Agarrar si son tomates, si son manzanas, jugos o lo que yo me quiero tomar. Ya no tengo quien me diga: ‘hágalo, no lo haga, siéntense’ y así”, siguió explicando.
En su relato contó que al llegar al supermercado vio a un señor haciéndole gestos con los ojos a su esposa para que agarrara un carrito. Ella dijo que se acuerda “de esos tiempos” y dice “óigame no”.
Sobre todo porque recuerda que si era ella quien tomaba el carrito era solo para empujarlo por el lugar. Y esto porque su ex era el encargado de agarrar lo que querían que todos comieran en la casa.
“Qué felicidad. No fue fácil dejarlo a mi edad. Tuve que hacer ajustes en mi presupuesto económico porque desde luego que se quedó con todo y yo nada más con mi pensión chiquita. Pero véanme, estoy feliz, relajada, contenta, duermo bien y soy completamente saludable. Como les digo hay que vivir y dejar vivir. Sí se puede”, concluyó la abuela, quien no deja de celebrar el cambio positivo de su vida luego de su divorcio.