La más reciente obra del director Christopher Nolan cuenta la historia de la bomba atómica a través de la mirada de su creador J. Robert Oppenheimer, papel que es interpretado por Cillian Murphy, el protagonista de la serie ‘Peaky Blinders’.
Este largometraje, se ha convertido en una de las grandes apuestas para el cine mundial, no sólo por disputarse en taquilla con Barbie, una de las películas más anunciadas del año. Sino también por elevar a la pantalla grande una narración histórica en donde convergen los aspectos más profundos de su protagonista.
El filme cuenta con unos detalles que vale la pena conocer. La cinta se filmó en el Instituto de Estudios Avanzados (IAS) de la Universidad de Princeton, en donde Robert Oppenheimer y Albert Einstein trabajaron juntos después de la Segunda Guerra Mundial, y utilizaron el edificio original del IAS, donde Oppenheimer era el director.
Además, la experiencia audiovisual que quiso utilizar el director, lo llevó a realizar la filmación de la producción con cámaras de gran formato, Panavision 65 mm y IMAX 65 mm. Un ambicioso experimento para producir elementos dramáticos, ya que son consideradas las cámaras más grandes del mundo, y regularmente suelen utilizarse para vistas panorámicas.
Por otro lado, ‘Oppenheimer’ contiene la primera escena íntima de la filmografía de Nolan. Al parecer, la inclusión de este tipo de escenas no corresponde a un capricho estético. Sino que es un instrumento para retratar la personalidad del físico neoyorquino y cómo sus relaciones interpersonales trascendían el aspecto físico e ideológico.
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¿Quién era J. Robert Oppenheimer?
Nacido el 22 de abril de 1904 en Nueva York, Robert Oppenheimer fue un físico de renombre internacional que saltó a la fama cuando fue contratado por el gobierno de los Estados Unidos para crear una bomba atómica que pudiera contrarrestar la amenaza de la Alemania Nazi.
Su carrera se vio empañada por la controversia personal que sostuvo al tener que lidiar con las implicaciones que tuvo la primer explosión nuclear del mundo. Robert creía que la creación de una bomba atómica era necesaria para acabar con la Segunda Guerra Mundial. Pero lo atormentaba saber que, al crear la bomba, también le abría las puertas a la destrucción del mundo.
Los conflictos personales lo llevaron a la desgracia cuando se opuso a la creación de la bomba de hidrógeno por asuntos morales y políticos, y fue acusado de frenar el desarrollo de ese proyecto. Como consecuencia de esto, en 1954 el físico perdió su autorización de seguridad y su puesto como asesor del gobierno estadounidense.
Oppenheimer pasó sus últimos años de vida preocupado por el conflicto entre la moral y el avance científico.