El extraño caso de desaparición de la joven mexicana Debanhi Escobar se ha hecho viral. La joven salió de fiesta con sus amigas la madrugada del 9 de abril y por altercados con sus acompañantes decidió devolverse a su casa, pero jamás regresó. Después de 13 días de búsqueda dan con el paradero de un cadáver que aparentemente describe las señales de la joven Escobar.
El inicio de la noche
Todo empieza el sábado 8 de abril, cuando la joven Debanhi Escobar, estudiante de criminología, decidió salir esa noche con dos compañeras de fiesta en Quinta Venecia, hacia el municipio de Escobedo, Nueva León, donde fue vista por última vez.
La noche transcurría y durante el evento, al parecer, las diferencias y malentendidos entre Escobar y sus acompañantes lograron que el momento se arruinara; por lo que decidieron tomar rumbos diferentes. Pero antes, sus amigas reaccionaron y decidieron enviarla de vuelta a su casa en un automóvil que según se trataba de un ‘contacto de confianza’.
Al parecer, medios locales señalan que el vehículo trabajaba bajo plataformas digitales.
El camino sin señales
Escobar esa noche decidió lucir un top blanco, una falda que le daba casi hasta sus tobillos y unos tenis de marca Converse de color negro.
Las características eran evidentes. El regreso, según sus amigas, era “seguro”, pero Escobar nunca retornó a su casa.
“Yo siento que Debanhi está viva, la vamos a encontrar”, indico Dolores Bazaldúa, madre de Escobar.
¿Qué sucedió? Es una de las preguntas que aún se hacen los millones de mexicanos desde que su rostro no apareció y empezó a difundirse por los todos los medios de comunicación hasta cruzar sus fronteras debido a la desaparición de la joven de México.
Según las primeras entrevistas de las personas involucradas apuntan hacia el conductor que la transportaba y tenía como misión dejarla en su casa. ¿Pero qué pasó durante el recorrido?
Según medios locales, Escobar recibió comportamientos de acoso por parte del hombre quien conducía el automóvil por lo que la reacción de la joven fue bajarse en medio de la carretera solitaria de Nueva Laredo para buscar la manera de llegar a su destino. Pero las cosas se complicaron.
“Se sube mi hija Debanhi al taxi de él, antes de aparecer en la foto que todos conocemos, ¿verdad? Después de analizarlo la fiscalía hay un documento donde el taxista, Juan David, extiende la mano a los pechos de mi hija… Juan David Cuéllar creo que se llama”, declaró Mario Escobar, padre de la joven desaparecida, a los medios de comunicación.
Lo extraño del momento fue que el ‘conductor de confianza’ tomó la decisión de fotografiar a Escobar, foto que aparece en los principales medios de la región, y posterior a ello la envía a las personas que le solicitaron llevarla, en este caso se trata de las amigas de Escobar.
Según las primeras declaraciones incompletas dadas por el conductor, es todo lo contrario: la joven se encontraba enfurecida y empezó a manotear desenfrenadamente, por lo que él decidió bajarla en medio de la carretera y abandonarla.
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La desesperación en México
Las señales de no contestar el teléfono, la manera de preguntar dónde hallar el paradero de la estudiante de criminología, generaron por supuesto miedos, angustias, y cientos de preguntas por parte de sus familiares y allegados a partir de su ausencia.
Las autoridades accionaron sus planes de búsqueda. Dispusieron para ello más de 200 uniformados de la Policía. Ejecutaron planes como carteles donde informaban sus características de cómo vestía esa noche e iniciaron la difusión y publicación de la desaparición de la joven de México.
“Lo que queremos es encontrarla, como Dios me la regrese, pero que me la regrese, y yo voy a estar para cuidarla toda la vida. A mí eso no me importa, no me interesa sacrificar mi vida por ella, pues es mi hija y es la única que tengo”; manifestó don Mario.
Al mismo tiempo, las autoridades ofrecieron 100 mil pesos mexicanos para quien ofreciera información veraz y oportuna que permitiera encontrarla sana y salva.
La investigación avanzaba sin resultados favorables. Los lugares interrogados apuntaban hacia el Motel Nueva Castilla, la compañía Orugatools (ya que se halló una alcantarilla sin tapa con dicho nombre), y la empresa de Transportes Internacionales Alcosa, esta última porque en medio de la búsqueda hubo indicios de que Escobar habría ingresado a la terminal.
Eso con el fin de comparar las versiones, de quienes trabajaron esa noche en cada lugar, con las más de diez cámaras que se encuentran instaladas en el lugar, según señalaron periodistas locales.
Un cadáver en el baño
Después de extenuantes labores de búsqueda durante 13 días, en el Motel Nueva Castilla algunos empleados empezaron a percibir un olor que se levantaba en el lugar, más exactamente en el baño.
En efecto los empleados al percatarse del lugar de los hechos donde provenía el fétido olor, pudieron lograr identificar un crucifijo que según coincide con el que esa noche vestía Escobar; el cuerpo hallado, aparentemente, llevaba puesto una falda larga y otros elementos que fueron llevados a estudio de investigación por el cuerpo forense, una vez llegó al lugar a realizar el levantamiento.
Cabe aclarar que la Fiscalía habría hecho presencia en el lugar días antes sin obtener mayores resultados. A lo que Mario Escobar en un video aparece señalando pésimo actuar las autoridades.
En medio de la investigación se capturó a un hombre que supera los 40 años de edad; quien encuentran aparentemente como sospechoso de la desaparición de la joven. Según las autoridades informaron tiene denuncias que lo señalan de acoso y rapto de mujeres.
Aún sin confirmar la identidad del cuerpo hallado, el dolor e instinto de Mario, como padre de Debanhi Escobar, hizo que informara a la prensa que pertenecía a su hija.
“El corazón de mi esposa y el mío pedía, exigía. Mi hija está muerta y no sé qué hacer; estoy molesto porque me equivoqué, creí en la Fiscalía, nunca me pasaron los tomos, les pedía copias, es mi derecho como víctima; nunca los tuve en mi poder, porque ellos no hicieron su trabajo”.
Las redes sociales de la joven Escobar fueron tomadas por sus familiares por lo que dan por hecho, según sus últimas publicaciones, que el cuerpo hallado en el Motel Nueva Castilla es el su “amada hija”.
En México los feminicidios subieron un 4 por ciento bajo el gobierno de López Obrador. Según cifras locales, en el año 2021 se registraron 3 mil mujeres asesinadas; 10 mujeres asesinadas al día.