En el planeta existen lugares completamente desconcertantes que muchas veces escapan de nuestra imaginación, como es el caso de la denominada ‘Puerta del infierno’.
Este lugar parece ser sacado de una profecía apocalíptica pero en realidad se trata de un enorme agujero que viene ardiendo desde hace varias décadas en Turkmenistán.
El pozo recientemente ha sido noticia luego de que el presidente de este país, Gurbanguly Berdymukhamedov ordenara cerrar el sitio porque “afecta negativamente el medio ambiente y la salud de la gente que vive en los alrededores”.
De acuerdo con los medios locales, el mandatario le habría pedido a su gabinete buscar la forma de extinguir esta gigante llamarada de gas natural a pesar de que el lugar se ha convertido en uno de los grandes atractivos turísticos de este país de Asia Central.
De esta forma, el gobierno de Turkmenistán estaría evaluando alternativas para cerrar el lugar y por eso se cree que han acudido a científicos extranjeros para encontrar algunas opciones que permitan extinguir el fuego por completo.
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Sin embargo, la iniciativa no solo estaría dirigida en poner fin a la llamarada sino encontrar alternativas para aprovechar la enorme reserva de gas que se encuentra en el lugar para comercializarlo y mejorar la calidad de vida de los habitantes.
“Estamos creando y seguiremos creando todas las condiciones necesarias para explotar las enormes reservas de hidrocarburos de la patria independiente y neutra en interés de nuestro pueblo”, indicó el presidente.
Turkmenistán es un país muy rico en petróleo y gas natural y por eso su estructura geológica explicaría las razones por las que se formó este desconcertante lugar en medio del desierto.
El origen del lugar
La historia de ‘La puerta del infierno’ se remonta a 1971 luego de que fuera creado accidentalmente cuando un grupo de geólogos soviéticos creyó haber encontrado un enorme yacimiento de gas en medio del desierto de Karakum.
Sin embargo, al iniciar las excavaciones y perforaciones para buscar el gas las cosas se salieron de control ya que toda la maquinaria y tiendas de campaña empezaron a ser tragadas por la tierra dejando al descubierto este enorme agujero.
Completamente desconcertados por lo ocurrido, los geólogos realizaron unos análisis en el cráter Darvaza, como oficialmente se llama, y evidenciaron que se trataba de un gran agujero de gas natural.
De esta forma, decidieron prenderle fuego para que el gas se consumiera y no llegara a poblaciones cercanas afectando a las personas y animales.
Pero las cosas no salieron como ellos pensaban ya que la fuente de combustión nunca se apagó y desde entonces el cráter lleva más de 50 años ardiendo.
Los expertos han estimado que en el pozo se pueden registrar temperaturas de aproximadamente 400 grados centígrados y cuenta con un tamaño de 70 metros de diámetro y unos 30 metros de profundidad.
Estas particulares condiciones ha convertido a la ‘Puerta del infierno’ en uno de los lugares más misteriosos del planeta, por lo que muchos han creado y difundido supersticiones sobre su origen.
Finalmente, aún se desconoce la forma como se podría apagar las llamas en el lugar ya que no será un trabajo fácil controlar un incendio que lleva ardiendo durante más de 50 años tras un accidente provocado por el hombre.