Internet se ha convertido en un servicio de suma importancia para la humanidad, ya que nos permitió mejorar los procesos productivos y la forma de comunicarnos; pero un nuevo estudio evidenció que una tormenta solar podría generar un colapso de la red que nos tiene conectados a nivel mundial.
En los últimos años, el planeta ha sido testigo de como la Internet nos ha permitido revolucionar muchos aspectos de nuestra vida, hasta el punto de que ha logrado sustituir algunos procesos que creíamos que solo lo podrían hacer las personas con ayuda de robots e inteligencia artificial.
Desde hacer compras o pagar recibos, jugar, estudiar, comunicarnos por videollamadas o ver películas a través de una variedad de dispositivos y aplicaciones; hemos estado presente ante una gran revolución tecnológica que no deja de sorprendernos generando una gran dependencia a la Internet a nivel global.
Sin embargo, la científica de la Universidad de California (Irvine), Sangeetha Abdu Jyothi, descubrió a través de una investigación que una supertormenta solar podría generar un apagón del Internet de forma intermitente o persistente durante varios días o meses.
Así lo reveló la investigadora al presentar el estudio en el marco del congreso anual (SIGCOMM); en donde alertó sobre los riesgos que podría enfrentar la humanidad frente a un posible “apocalipsis de Internet” derivado de este fenómeno solar.
¿Cuáles son los riesgos?
Los misterios del Sol y su comportamiento siempre han sido uno de los temas que más inquieta a los científicos quienes desde hace muchos años han tratado de descifrar su actividad para poder determinar los riesgos que puede representar para la Tierra y para las misiones espaciales.
De esta forma, las tormentas solares o magnéticas representan un riesgo para la Tierra debido a que pueden afectar las comunicaciones y, en el caso más extremo, dañar las redes eléctricas y equipos en el planeta.
Además, son un riesgo para el funcionamiento de los satélites, naves espaciales, interrumpir la aviación y causar una pérdida temporal de las señales de GPS y las comunicaciones de radio.
Ver más: Caída de Facebook, Instagram y WhatsApp ‘enloquece’ Internet: lo que se sabe de estas fallas
En ese sentido, la científica de la Universidad de California descubrió que la Tierra no estaría preparada para enfrentar una supertormenta solar; por lo que estas redes estarían expuestas a estas partículas magnéticas afectando su funcionamiento y alterando nuestra forma de vida moderna.
“Lo que realmente me hizo pensar en esto es que con la pandemia vimos lo poco preparado que estaba el mundo. No había un protocolo para lidiar con esto de manera efectiva, y ocurre lo mismo con la resiliencia de Internet. Nuestra infraestructura no está preparada para un evento solar a gran escala”, indicó “Abdu Jyothi al portal WIRED.
¿Qué probabilidades hay de que esto realmente ocurra?
Aunque existen pocas probabilidades de que se registre una tormenta de gran magnitud que impacte a la Tierra, aún no se ha estudiado a fondo el impacto que podría tener este fenómeno en la infraestructura de las redes.
De acuerdo con la experta, las conexiones a Internet locales o regionales tienen pocas probabilidades de sufrir daños debido a que se han venido actualizando con cables de fibra óptica.
Pero un escenario muy diferente se registra con los cables submarinos que conectan a los continentes; ya que sus repetidores de señal son vulnerables a las corrientes geomagnéticas y podrían quedar inservibles en caso de que se presente un daño.
Los expertos han explicado que los países ubicados en las latitudes más altas, como EE.UU. y el Reino Unido son los más vulnerables a este tipo de fenómenos; por lo que algunas compañías ya han venido actualizando sus equipos y redes para mitigar un posible impacto.
“Actualmente no hay modelos disponibles de cómo podría funcionar esto. Comprendemos mejor cómo estas tormentas afectarían los sistemas de energía, pero eso es todo en tierra. En el océano es aún más difícil de predecir”, resaltó la investigadora.
Los expertos han explicado que solo dos eventos de esta magnitud de supertormentas solares se han registrado en la historia; el evento Carrington ocurrido en 1859 y que provocó un estallido de los telégrafos y la formación de auroras sobre el la zona ecuatorial.
Asimismo, en 1921 se registró una perturbación que afectó la infraestructura eléctrica y las líneas de comunicación; pero todos estos eventos se registraron sin la existencia del Internet y los nuevos equipos y tecnologías que usamos en la actualidad.
Finalmente, la investigadora explicó que es fundamental empezar a adaptar las redes de Internet del planeta a este posible escenario que desestabilizaría completamente la conexión dependiendo del nivel y las zonas de afectación.