En la tarde del lunes 27 de junio fueron encontrados 50 cuerpos de migrantes en el remolque de un camión abandonado al suroeste de una carretera en San Antonio, Texas. El trágico hallazgo fue comprobado por las autoridades.
“Uno no viene a trabajar esperando abrir la puerta de un tráiler y toparse con una pila de personas muertas. En este momento hemos procesado los cuerpos”, comentó Charles Hood, jefe de bomberos, en una conversación con la prensa.
El funcionario también informó que 16 personas, 12 adultos y cuatro menores fueron trasladados a hospitales de la ciudad.
“Los pacientes que vimos estaban calientes al tacto, sufrían de golpes de calor, agotamiento por el calor, ya que no había indicios de agua en el vehículo. Era un camión refrigerado, pero no había evidencia de que hubiese una unidad de aire acondicionado funcionando”, mencionó Hood.
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Las autoridades tienen tres personas arrastradas
El jefe de policía de San Antonio, William McManus, indicó que las autoridades estadounidenses tienen tres personas arrestadas. “Esta noche estamos haciendo frente a una horrible tragedia humana” y “esperamos que los responsables de poner a estas personas en semejantes condiciones inhumanas sean perseguidos con todo el peso de la ley”, comentó.
La policía fue alertada a las 5:55 de la tarde. Una persona informó de la presencia de un cuerpo en una avenida cerca a la base de la Fuerza Aérea de Lackland.
“Un empleado de uno de los edificios detrás de mí oyó un grito de auxilio”, mencionó al periodista. “Fui a investigar, hallé el contenedor con las puertas parcialmente abiertas, lo abrí y di un vistazo, hallando varios individuos fallecidos”.
La investigación del trágico incidente de los migrantes en Texas fue entregada al Departamento de Seguridad Nacional (DHS), que mencionó en un comunicado que había iniciado un estudio por sospecha de tráfico humano.